El marido de Anna Bell Peaks es un hombre de negocios y parece más preocupado por su trabajo que por complacerla. Así que para sentirse guapa y realizada, quiso hacer una sesión de fotos y posar muy sexy delante de un fotógrafo. Pero al final lo que acabó haciendo fue tener un momento muy caliente con el profesional de la fotografía en el baño, donde empezó por eyacularle encima con un squirting brutal. Luego se quitó el vestido que llevaba puesto y le pidió que le follase el coño, volviendo a experimentar otro squirting y logrando al fin sofocar sus necesidades sexuales.