Cuando acabó los ensayos, esta animadora necesitaba que alguien la llevase a casa y por suerte para ella, el entrenador del equipo de fútbol se ofreció a ello. La llevó en su coche y la jovencita quiso invitarle a pasar para que se tomara un café, pero como estaban solos, aprovechó el momento para quitarse las braguitas que llevaba puestas y seducirle en el sofá hasta ponérsela bien dura. El entrenador se dejó llevar por el momento y finalmente, los dos pasaron la tarde dándole al sexo y acabando con la atracción sexual que se tenían desde hacía tiempo.