Los padres de esta colegiala le pidieron que se quedase en casa para recibir al pintor que habían contratado. Querían que le dijese lo que debía pintar de la casa, pero la morena vio que se trataba de un chico mulato y no pudo evitar ligárselo. El profesional se dio cuenta de que la joven colegiala no llevaba nada debajo de su falda y tuvo una erección brutal que ella notó al instante y no dudó en chupársela, luego se puso a cuatro patas y finalmente, pasaron una tarde de sexo interracial que ninguno podrá olvidar.